Es posible que en alguna ocasión y sobre todo en el mundillo del marketing, hayas oído ya sea mediante ofertas de trabajo o mediante cualquier conversación, la palabra GPV.
Muchos de nosotros habremos asentido con la cabeza a modo de #postureo y sin saber muy bien que significa. En este post vamos a aclarar las dudas y de paso dar algunos consejos con los que un buen GPV debería sentirse identificado.
Empezaremos por el principio, GPV significa “Gestor de punto de venta” .Para que lo entendamos mejor todavía, son aquellas personas que optimizan los servicios de cualquier punto de venta para conseguir los máximos beneficios en la empresa o empresas para las que trabaje.
Pongamos un ejemplo siendo por un día un GPV de Alcampo. Estos GPV se encargarían de revisar que el hipermercado al que pertenecen, tengan la mejor calidad posible, los precios mas competentes y evitar en la medida de lo posible la diferenciación de precios con marcas similares.
Debe mantener el número de productos ideal para ser vendido y evitar almacenar demasiado en naves con el objetivo de reducir costes, mejorar la presencia de los productos mas “vendibles”, ofrecer promociones que faciliten la salida de productos y un sinfín de mejoras que pongan a tu cliente un escalón por encima de la competencia.
Todo este trabajo requiere que el GPV sea una persona comunicativa, con don de gentes y empatía y sobre todo que le encante la relación directa con los clientes.
Los valores que generalmente se buscan en entrevistas de trabajo son:
-Organización
-Planificación
-Compromiso
-Proactividad
Si cumples con todas estas cualidades, seguramente el mundo esté esperando un GPV como tú.
Un GPV profesional conoce a cada uno de sus clientes como la palma de su mano, sabe cómo tratarlos y cómo debe actuar con ellos en cada momento, adaptándose a sus caracteres y a sus compromisos. El objetivo de todo esto no es otra cosa que mantener las relaciones lo máximo posible y tener confianza por parte de las empresas en las que ha sido contratado.
Por todo lo comentado, en el mundo del marketing, el Gestor de punto de venta es esencial para que una empresa pueda evolucionar y no quedarse atrás con sus competidores.